Me encuentro con una persona

En la mayoría de los casos, sobre todo en el ámbito relacionado con lo socio sanitario, en el momento que nos disponemos a recibir a una persona en el despacho, de forma automática, adoptamos el rol de profesionales y, el individuo que entra por la puerta, el de usuario. Dos tipos de papeles en un mismo escenario que, si no se interpretan como es debido, puede darse el error de colocarnos como profesionales un escalón por encima del usuario, quien meramente escucha los sabios, valiosos e imprescindibles consejos que le lanzamos desde las alturas.


NO DEMOS SABIOS E IMPRESCINDIBLES CONSEJOS DESDE LAS ALTURAS

No debemos de olvidar que a persona que se sienta frente a nosotros se trata de un individuo que ha intentado, a toda costa, liberarse de la dramática crisis en la que se encuentra sumergido, haciendo uso de todos y cada uno de los recursos que ha visto oportunos utilizar. Por lo tanto, nosotros somos la última de las balas que le quedaba por gastar. La última esperanza que le puede ayudar a encontrar la salida del laberinto en el que se encuentra.

SAQUEMOS PROVECHO AL ULTIMO DE LOS RECURSOS QUE LE QUEDAN POR PROBAR AL INDIVIDUO

Si nuestra verdadera intención es poder ayudar a la persona a poder superar la situación que en estos momentos le consume, es importantísimo que sigamos unas pautas básicas que nos ayudarán a poder poner en marcha el proceso de la escucha activa que, como veremos, son muchos los beneficios que la misma puede aportar a lo largo de la intervención.

ESCUCHAR AL USUARIO NO ES SOLAMENTE OÍR LO QUE DICE


Como buenos profesionales que somos, debemos ser correctos y meticulosos interpretadores de lo que estamos viendo. Es importante que seamos consciente de cómo el usuario se va  a expresar de la mejor de las maneras que sabe, por ello tenemos que estar atentos a la información verbal como no verbal que nos transmite

UNA CARA TRISTE SIGNIFICA QUE DETRÁS SE ESCONDE UNA EMOCIÓN DE TRISTEZA CREADA POR UN PENSAMIENTO 

Uno de los principios básicos y primordiales para que se de la escucha activa es la existencia de un clima de confianza, en el que le hagamos ver al individuo que nos interesa lo que nos está contando, le aceptamos, comprendemos la manera en la que está vivenciando la situación y nos encontramos dispuestos a ayudarle a caminar junto a él por el camino de la recuperación, apoyándole en todo momento que sea necesario.

NOS INTERESA LO QUE NOS CUENTA, ENTENDEMOS COMO SE SIENTE Y ESTAMOS DISPUESTOS A AYUDARLE.

Muchas veces los propios silencios que pueden surgir en determinados momentos nos incomodan y tratamos de evitarlos y taparlos sacando a la luz preguntas o cuestiones de cualquier temática, con tal de no dar paso al momento incómodo. Pero debemos de comprender que los silencios son necesarios en todo intercambio de información. Un espacio de silencio puede ayudar a que el usuario se tranquilice, ordene sus ideas y sienta que le estamos escuchando de forma activa ya que, en muchas ocasiones, sin darnos cuenta y con el afán de no dar pie al silencio, interrumpimos a la persona no dejando apenas tiempo a que reflexione sobre lo que está contándonos, transmitiéndole prisa y brevedad en sus contestaciones.

Os dejo un interesante VIDEO sobre la ESCUCHA ACTIVA

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