Enseñar a tomar decisiones

Todavía hoy en día, desgraciadamente, hacemos uso del antiguo paradigma, manera de actuar, cuando a una persona con algún tipo de discapacidad le llega el momento de tener que tomar una decisión, instintivamente, de forma automática, solemos tener la costumbre de ser nosotros como: profesionales, hermanos, padres, familiares, amigos, vecinos... los que adoptamos la decisión por el individuo con discapacidad, todo ello a causa del piloto automático que llevamos encendido.

DESCONECTAR EL PILOTO AUTOMÁTICO PUEDE AYUDAR A QUE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD TENGAN LA OPORTUNIDAD DE TOMAR DECISIONES

Si nos paramos a reflexionar, la toma de decisiones sobre los acontecimientos que van surgiendo en nuestras vidas, es algo sumamente personal e íntimo. Las decisiones que en un día se van adoptando son múltiples y variadas: ¿qué ropa me pongo?, ¿en que invierto mi tiempo libre?, ¿qué hago hoy para comer?, ¿le llamo a mi amigo para salir a dar una vuelta?, ¿voy al gimnasio o mejor a dar un paseo?... Muchas de ellas, por inútiles, sin sentido o simples que parezcan, determinan la capacidad de la propia persona para ir día a día luchando por su autonomía personal. Esto es, por inútil que parezca poseer la posibilidad y libertad para escoger la ropa que hoy voy a vestir, se trata de un acto que contribuye de forma directa y positiva hacia la determinación de mi propia autonomía personal.

SI QUEREMOS QUE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD LUCHEN POR LA REIVINDICACION DE SU PROPIA AUTONOMÍA PERSONAL, LES TENDREMOS QUE DAR LA OPCIÓN DE ELEGIR

Como al principio del artículo se ha mencionado, en muchas ocasiones solemos olvidar que las personas con discapacidad, al igual que el resto de las personas, también tienen el derecho de poder tomar sus propias decisiones. Ellos, al igual que el resto, también tienen el derecho a decidir qué quieren hacer en su tiempo libre, con quién quieren reunirse o qué película desean ver. Cuando se nos olvida del derecho a decidir de los demás individuos, cometemos, inconscientemente y con la mejor de las intenciones, actos como: elegir la ropa que hoy llevan puesta, planificarles lo que van a hacer el fin de semana e incluso escoger con qué personas debe de reunirse. 

EL VIEJO PARADIGMA SE TRANSFORMA A TRAVÉS DE LA ENSEÑANZA DE TOMA DE DECISIONES

Entonces ¿QUE DEBEMOS DE HACER?

lo primero que tenemos que hacer es tener siempre presente que las personas, tanto con discapacidad como sin ella, tienen el derecho a tomar las decisiones sobre su vida. Lo que supone que en muchas ocasiones la persona tomará decisiones erróneas sobre su vida que le afectaran de forma negativa pero ¿quién no se ha confundido y desencantado con las decisiones que algún día ha tomado? ¿por ello debemos de dejar de tomar decisiones?. Es importante que ente las personas nos ayudemos mutuamente a tomar decisiones ¿pero cómo?: ACONSEJANDONOS. La propia o ajena experiencia nos puede ayudar a tomar decisiones sobre nuestra propia vida. Escuchar opiniones y experiencias de otras personas, nos puede ayudar a la hora de ten que adoptar una decisión en un momento dado de nuestra vida. Es por ello por lo que nuestra labor, en estos momentos, se debe de basar en ayudar a las personas que más les cuesta tomar decisiones, a que lo vayan haciendo cada vez con más facilidad, con el objetivo principal de luchar por la autonomía personal del mismo.